13 marzo 2020

He aquí los textos del
II Concurso de microrrelatos de temática amorosa

En la categoría A


ETIQUETAS

“A veces es tan fácil ocultarse detrás de una sonrisa, que hasta resulta creíble.” Se me cruza ese pensamiento mientras doy mi paseo matutino. Decido sentarme en un banco , y por culpa de esa frase recuerdo aquellos momentos en los que salía a la calle y decidía ser alguien que no era, solamente por el hecho de que no me quería a mi misma, y prefería ser alguien acorde con los estereotipos que nuestra sociedad ha decidido poner. Las llamadas etiquetas, un modo fácil de dar nombre a las cosas, pero en realidad son cárceles invisibles que nos encadenan a la mayoría. Y por ese motivo empecé a sufrir conmigo, y con los demás.

Me resultó extraño cómo personas con las que creía tener una conexión, se iban, se alejaban, dejándome sola e incluso hablando a mis espaldas. Expulsaba de mi vida de forma inconsciente a personas que me reflejaban sinceridad, me intentaban ayudar, y me gustaría darles las gracias, aún sabiendo que era tan cabezota de no aceptar sus consejos. Hice oídos sordos, y me resultó difícil salir de esa situación, ser libre, y poder expresarme a mi manera.

Todo empezó a cambiar cuando acepté mis errores, y me di cuenta de la falta de amor propio que tenía, sabiendo que la única persona que me podía hacer feliz es la misma que está ahora en una calle sola, volviendo a su pasado, arrepintiéndose de todo sus actos y escribiendo este microrrelato.

Categoría A. Tercer premio
Marina González Gómez 4ª A 


SENTIMIENTOS ENCONTRADOS


Desde pequeña siempre he sido una niña callada, pasaba inadvertida para que la gente no se compadeciese de mí; y pensaréis, ¿por qué?, pues bueno mis padres murieron en un accidente tres días después de mi nacimiento, trágico lo sé, el caso es que nadie se quiso hacer cargo de mí, así que acabé en un orfanato de mala muerte donde soy como una pared más. Pero hoy, hoy algo cambiará, por fin ha llegado ese día tan esperado en el que saldré de aquí, una nueva vida me espera, o eso pensaba yo.

Dos años después…

Aquí estoy, entre las cuatro paredes de mi vieja habitación, en el orfanato. No sé qué ha sucedido realmente, lo único que sé es que no decía lo que él quería, porque yo nunca digo cosas que no siento, así que no podía decir esas dos malditas palabras que tanto me decía que dijese. Por lo tanto estoy de nuevo en este lugar, pero algo ha cambiado esta vez, estoy rodeada de libros, libros viejos, nuevos, todos ellos testigos de mis noches de sufrimiento. En mis manos tengo abierto el libro que marcará el antes y el después.

Han pasado varios días desde que llegué y hoy por fin lo he dicho por primera vez, te quiero, no ha sido a algo vivo, sino a personajes que jamás serán reales y que poca gente entenderá.

Un amor diferente, hacia algo minúsculo y enorme a la vez, libros.



Categoría A. Accésit
Lucía Soler Leal 4º A


A MI AMOR PARTICULAR

Desde pequeños, papá siempre es el héroe, él siempre cuidará y protegerá a su princesa. Es posible que veamos muchas películas o leamos mucho sobre ello, pero... ¿Y si la historia cambiase? Quizás para algunos, papá n
o será un héroe, será un monstruo que no cuida sino destruye todo a su paso. Papá un día llegará borracho a casa, romperá todas las cosas que encuentre, incluido el corazón de mamá, ya sea con palabras o golpes. Después se marchará dejando todo tirado en el suelo para que otra persona lo recoja.Todo ello mientras unos pequeños angelitos duermen. Uno de ellos se despertará por el escándalo y al bajar las escaleras encontrará a mamá llorando mientras retira todo el desastre y, cuando este le pregunte por qué llora, ella le responderá con una mentira piadosa; "se me ha metido algo en el ojo, cariño". Él no entenderá nada pero aun así le soplará en él y abrazará a mamá para que deje de llorar.
Con el paso del tiempo ellos crecerán y empezarán a darse cuenta de que la vida no es un cuento. Que el príncipe traicionó a la princesa dejándola sola, ya no había héroe. Que la princesa aprendió a valerse por sí misma, sin ayuda y sin necesitar a nadie. Para esos niños mamá será su nueva superheroína, quien les levante si se caen y les seque las lágrimas cuando lloren.
Esto es amor y gracias a mi luchadora lo entendí.

Categoría A . Accésit
Patricia Amador Mullor 4ºA


A espera del reencuentro

A espera del reencuentro Se encontraba la señora Smith remendando las mangas de aquel elegante traje, mientras pensaba en lo orgulloso que se sentiría su marido al verlo. Él agradecería todos aquellos detalles que su esposa había elaborado tan minuciosamente, desde la cara tela hasta aquellos finos bordados. También sabía que al reencontrarse después de muchos años su esposo la miraría como nunca, y que sentirían ese cariño que sólo ellos pueden reconocer. Lloraría, sí, puede que bastante, pero la situación lo merecería. Pensaba en tantas cosas la señora, que no se dio cuenta de la presencia de su hija. Esta carraspeó para llamar su atención y le preguntó casi en un murmullo:

-Madre, ¿cuándo saldremos hacia la funeraria?

-Espera hija, que tu padre no se irá sin este traje - respondió con una sonrisa.


Categoría A .Accésit


Ulyana Marchuk 3ºESO B

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